Montse Salvatierra lleva años perdiéndose la Feria, la Semana Santa y el Valme. Vive desde el año 2000 en Londres, su marido es de Hong Kong y su nostalgia es máxima
Montse Salvatierra Romero ha cumplido en abril 52 años, de los que la mitad los ha vivido en Inglaterra. Forma parte de ese grupo de nazarenos que partieron para cumplir sus sueños y ahora sin embargo sueñan con volver… a Dos Hermanas.
Te pierdes la feria, ¿no?
Sí. Solo puedo ir a Dos Hermanas los veranos y algunas Navidades. Y al Valme no voy desde que estuve de baja maternal, en 2007.
Llevas 26 años en Inglaterra, donde has formado una bella familia. ¿Cómo llevas la nostalgia?
De cero a diez, mi nivel de nostalgia es diez. Hemos estado a punto de venirnos a España. Le dije a mi marido: “Por ti he estado 26 años en Inglaterra y ahora te toca a ti hacer algo por mí: necesito el sol. ¿Por qué no nos vamos a España y allí te jubilas?”
¿Y cómo va esa negociación?
Nos propusimos venir en septiembre de 2022, pero después hemos pensado que mejor cuando mi hija Alicia, que tiene 14 años, acabe la ESO. Ella quiere estudiar Psicología, aunque me detiene un poco la idea del racismo. A mi otro hijo, Alejandro, de 18 años, le encanta España aunque no le gustan ni las gambas ni el jamón. Él se ve más haciendo vida en Londres.
Voy a aprovechar para preguntarle a tu hija Alicia, que está aquí contigo. ¿Te gusta Dos Hermanas?
Sí. Yo nací en Londres, pero me encanta la gente de España, y me siento española y china a la vez. Los ingleses son unos saboríos. En España hay más vida. Lo que no me gusta mucho es la comida, prefiero la china.
Tu hija se expresa en un perfecto andaluz. ¿Qué idioma hablais en casa, Montse?
Con mis hijos hablo en español, pero entre ellos hablan en inglés.
Háblame de tu marido.
Se llama William To, trabaja como consultor en IBM. Nació en Hong Kong y con 8 años se vino a Londres. No habla chino del todo, sino un dialecto del cantonés ¡y también español!
¡Ah! ¿Sí? Déjame que hable con él. Cuéntame, William, cómo acabaste casándote con Montse.
Siempre me han gustado las mediterráneas, ya había salido antes con una italiana. Conocí a Montse en Londres, gracias a un amigo en común. Nos empezamos a gustar y con el tiempo nos fuimos a vivir a Manchester . Y tras cuatro años de novios nos casamos el 5 de agosto de 2000 en Dos Hermanas, en la iglesia de Santa María Magdalena, porque Montse quería casarse en su pueblo. Nos casó un profesor amigo de la universidad que era también sacerdote.
¿Te irías a Dos Hermanas con Montse si te jubilaras?
Claro, de allí me encanta todo: el tiempo, la gente y el gazpacho. No me aburriría. Estudiaría idiomas y pintaría.
Y a ti, Montse, ¿te supuso algún problema enamorarte de un chino?
A mí me encanta William. ¡Pero a mis padres casi les da un ataque cuando les dije que estaba saliendo con un chino!
Tu madre, Rosario, ya falleció. ¿Qué te une a Dos Hermanas?
Está mi padre, Salvador, mi hermana Irene, tres años más pequeña que yo, mis dos sobrinos, mis amigos y están mis raíces. Me crié en la calle Amancio Renes, estudié en La Almona, después en la Doctrina Cristiana, y el COU lo hice en el Instituto Virgen de Valme.
Estudiaste la carrera de Filología Inglesa. ¿Cuando te fuiste a practicar el idioma?
Justo cuando estudiaba COU conocí a Rachel, una chica norteamericana que estaba en Dos Hermanas de intercambio. Al terminar el curso, me fui cuatro meses con ella a Fort Myers, en Florida. Volví a España, y en 1995 me fui de “au pair” a Purley, en Inglaterra. Más tarde conseguí trabajo en una parafarmacia en Londres. Vivía en una residencia de chicas y mi habitación estaba frente al Museo Británico. En esa época conocí a William. Tuve que regresar a España 8 meses porque se reprodujo el cáncer de mi madre. Cuando volví ya fue a Manchester, donde empecé a trabajar como profesora.
Actualmente vivís en el barrio londinense de Harrow y tú trabajas de profesora de español en un colegio privado de chicas. ¿Hay algo que no te guste de Londres?
Por supuesto: el no ver a la familia y el clima. ¡Vemos muy poco el sol! Aquí solo hay tiempo para ir al trabajo y regresar a casa, aunque es verdad que tengo muchas amigas españolas y sudamericanas.
Me has dicho que te puede la nostalgia. ¿Qué haces cuando vas a Dos Hermanas?
Pues la última vez fue en Navidad. Cuando llego, me encanta irme a la Confitería San Rafael y comerme un tocino de cielo, no hay una sensación igual a esa. Me gusta pasear por la calle Real y también por el centro de Sevilla.
Mandamos un cariñoso saludo a Montse desde la feria. ¡Quizás ya pueda vivir en persona la del 2023!