Agustín Serrano: «no hay cosa más bonita que vender ilusiones»

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Agustín Serrano

Agustín Serrano es vendedor de la ONCE y es muy conocido además porque trabajó en el negocio familiar: el bar «El Emigrante»

Agustín Serrano Marchena nació en Dos Hermanas en agosto de 1983. Estudió EGB en el CP Cervantes. Siempre ha vivido en la barriada de La Pólvora. 

Es vendedor de la ONCE desde junio de 2014. Previamente, trabajó en la hostelería, en el negocio familiar, «El Emigrante», por lo que es muy conocido. Su padre es uno de los propietarios.

«El bar lo he mamado yo desde chiquitito. Cuando terminé de estudiar me fui primero a la construcción, después al mármol, y arranqué en el Emigrante y siempre he estado allí, siempre detrás de la barra. Siendo un niño me decía mi padre: «a la pileta a piñón fijo» y no sabía lo que era eso y era que no me moviera de la pileta fregando, y tenía yo ocho o nueve años», nos cuenta.

Agustín Serrano nos explica que la familia de su padre es de Alcalá del Valle (Cádiz). «Mi padre se vino de niño, con cinco años, aquí a Dos Hermanas», indica. Y la de su madre, «de aquí de Dos Hermanas de toda la vida». «El padre de mi madre es «El Marchena» que ha tenido toda la vida en la Cuesta de los Machaos el quiosco. Y mi abuela, la madre de mi madre, era Carmen «la lenta», también muy conocida por aquí por la zona»

«El Emigrante» se abrió en 1972, según nos cuenta Agustín. Se le puso ese nombre por su abuelo Andrés, el padre de su padre, que estuvo muchos años en Alemania de emigrante y de ahí el nombre.

Hermanas de su padre son las propietarias del taller y establecimiento «Hermanas Serrano», muy famoso en la ciudad.

Entre sus aficiones figuran el fútbol, la ornitología y le gusta mucho la pesca de orilla en la playa, afición que tiene abandonada por su dolencia en la pierna, aunque de vez en cuando se escapa con uno de sus hijos que también es aficionado.

Agustín Serrano está casado con Edelmira y tiene cuatro hijos: Tiago, Diego, Agustín y Amanda.

Es el Secretario tanto de la Asociación Vecinal La Pólvora como de la Asociación Ornitológica El Malinois de Dos Hermanas.

Agustín Serrano responde a nuestras preguntas:

¿Cuál es su profesión, desde cuándo y por qué?

Actualmente soy vendedor de la ONCE. Ya hace nueve años que estoy de cuponero. Previamente estuve trabajando en la hostelería donde estuve unos nueve años. Y antes, trabajé en el sector de la construcción. Desde que tenía 17 años hasta ahora no he parado ni un día de trabajar.

¿Cuándo y por qué comienza como vendedor de la ONCE?

En junio de 2014. Me operaron de artrosis en el pie derecho a raíz de una operación que me hicieron de niño por tener los pies planos. Y ahí me incapacitaron. A raíz de incapacitarme me coloqué en la ONCE. Y aquí estamos, y desde hace un año y pico estoy también de mentor, dándole las prácticas a los que van entrando nuevos.

¿Cuáles son sus puntos de ventas?

Mi punto de venta es la esquina de la calle Canónigo con la calle San Francisco, en el centro, que suelo estar hasta las 13.00 horas y después por la tarde y a medio día en la calle Isaac Peral por la zona de El Emigrante y Santa Isabel.

¿Cuántos cupones puede vender al día?

Desde la pandemia para acá ha bajado mucho la venta. Vamos haciendo lo que se puede. 

¿Hay en Dos Hermanas afición a otros productos de la ONCE como los rascas por ejemplo?

En Dos Hermanas, la verdad es que salen productos de la ONCE de todo tipo, tanto rascas, como cupones, eurojapot…

¿Ha dado algún premio importante?

La verdad es que aún no he dado un premio importante. He dado muchos premios de 1.000 euros, 500 euros, 750… pero en eso nos levantamos todas las mañanas: intentar darle una alegría a la gente que falta hace. Vender ilusiones.

¿Cuenta con una clientela fiel?

En Dos Hermanas, como han caído varios premios importantes, la gente es aficionada a los productos de la ONCE. Y es que no hay cosa más bonita que vender ilusiones, que es lo que vendemos nosotros.

¿Alguna anécdota que nos pueda contar?

La última vez que me operaron, ahora ha hecho tres años, a «El Emigrante» estaba yendo otro compañero ya que yo estaba de baja y este compañero dio el premio allí en el cupón. Aquella noche estaba yo en el cine con mi mujer y todo el mundo dándome la enhorabuena. Pero el premio lo había dado otro. También me alegré por que les tocó a muchos clientes mío ese cupón.

Otra anécdota es que perdí 70 cupones del Sorteo Especial del Día del Padre. Alguien con buen corazón los encontró y los devolvió a la Policía y la Policía me los entregó a mí. Si se hubiera quedado con ellos los hubiera tenido que pagar yo.

¿Cuál es el número más raro que le han pedido?

A cada instante me piden números raros, los cinco números repetidos, los cinco 7, los cinco 8… Fechas con seis números y cuando les digo que el cupón sólo tiene cinco dicen que no, que tiene que ser los seis… cosas así. Los números raros es casi a diario.

Por otro lado, ¿cuándo comienza su relación con la AV La Pólvora?

Entré como socio en el año 2015. 

¿En qué momento decide implicarse y formar parte de la junta directiva?

Pertenezco a la junta directiva desde abril de 2018. 

¿Cómo ve el movimiento vecinal en estos momentos?

Desde la pandemia para acá está mucho más flojito. A ver si a partir de este año empezamos a levantar cabeza. Antes de la pandemia, en La Pólvora, teníamos cursos de yoga, patronaje, cursos de niños, manualidades, patchwork… De la pandemia para acá lo que ha quedado ha sido el curso de yoga, patronaje y baile de niños.

Pero poniendo todos un poquito de nuestra parte, tanto los vecinos como la junta directiva, seguro que esto lo vamos a llevar como hace unos años para estar arriba del todo.

A lo largo del año hacemos actividades como el Cartero Real, la Cabalgata de Reyes Magos, los Carnavales, el Día de Andalucía, la Semana cultural, una convivencia para la Tercera Edad, la noche de Halloween, el Día del Socio y en diciembre los concursos de los canarios.

Además, también pertenece a una asociación ornitológica. Háblenos sobre esta afición.

En la Asociación Ornitológica El Malinois de Dos Hermanas entré como socio en el año 2014. Llevo en la junta directiva llevo desde 2018 o así. Es una asociación pequeña en la que solo nos dedicamos a los canarios de la raza malinois.Tenemos al año dos concursos uno social y otro nacional. Los dos concursos los hacemos en la sede de la AV La Pólvora. Al concurso social viene un juez internacional de Valencia y en el concurso nacional vienen dos jueces de Bélgica – este canario es de Bélgica- y están tres o cuatro días enjuiciando pájaros.

Desde hace unos tres años tengo unos pájaros bastante buenos y me he traído premios de muchos pueblos: Chiclana, Cantillana, Olvera, Vélez Málaga… Y el año pasado, en la modalidad de dúo, fueron mis pájaros campeones de España en Talavera de la Reina. Y aquí, en Dos Hermanas, también me llevé premios con los pájaros.

Este año aún no han empezado los concursos, vamos a ver cómo se portan. 

Son pájaros cantos. Hay tres razas de pájaros de canto: timbrado, roler y malinois. Los míos son malinois. Los concursos son cantando los pájaros.

¿Cuántos pájaros tiene actualmente?

Aproximadamente 150. Necesitan una atención diaria todos los días del año. Todos los días del año igual que comemos nosotros tiene que comer ellos. Su limpieza… Y cuando llega la época de entrenamiento son unas dos horas todos los días. Tengo que ir sacándolos por equipos, eligiendo los que me sirven para los concursos, los que no me valen. Tengo unas cabinas de canto. Tengo que acostumbrarlos a cantar a la hora que yo quiera que cante, no a la que ellos quieran, porque en los concursos lo mismo les toca cantar a las nueve de la mañana que a las seis de la tarde. Los tengo en una nave que tiene mi padre. Si yo no puedo ir mi padre se encarga de ir a cuidarlos. Él es el que me echa una mano con ellos.