David Roldán se encontraba en el interior de la Medina de Marrakech cuando ocurrió el seísmo
David Roldán Franco tiene 21 años. Se encontraba de vacaciones junto a su pareja, Laura Nogues Ramírez, cuando se produjo el fatídico terremoto de Marruecos.
David Roldán ha estudiado el grado de Técnico Superior en Enseñanza y Animación Sociodeportiva y actualmente trabaja como monitor deportivo.
Ha jugado a waterpolo en el Club Waterpolo Dos Hermanas durante 15 años donde aún sigue entrenando como portero.
David Roldán nos cuenta cómo ha sido la experiencia de vivir en primera persona un terremoto.
¿Cuándo viajas a Marruecos y por qué?
Viajé a Marruecos, concretamente a Marrakech, el día 7 de septiembre por vacaciones. Viajé con mi pareja.
Has vivido en primera persona el terremoto, ¿dónde te encontrabas?
Viví el terremoto en primera persona cuando estaba a punto de dormir en la habitación del Riad en el interior de la Medina.
¿Cómo fueron esos momentos?
Mientras ocurría el terremoto no sabíamos con certeza qué estaba pasando, pero fue un momento de mucho miedo porque todo empezó a agitarse con fuerza y se escuchaba un ruido muy fuerte de todas las cosas chocando y moviéndose a la vez. No se escuchaba nada más aparte del ruido de las cosas de la habitación y del mobiliario desde dentro de la habitación, pero una vez pasaron esos 30 segundos de miedo, abrimos la puerta y se escuchaba gente corriendo y gritando asustadas saliendo de sus casas para dormir en el exterior por el peligro de derrumbamiento que había en el momento.
Nos quedamos hasta las 4 de la mañana en el exterior -por una alerta que emitieron la cual decía que a las 2.10 horas de la mañana iba a ocurrir otro terremoto de una magnitud de 7.1- con el dueño del hotel que nos acompañó en todo momento ya que mi pareja y yo estábamos solos en el Riad, no había ningún otro turista. Finalmente a las 4 de la mañana volvimos a la habitación con miedo de que volviera a pasar otro y dormimos lo que pudimos, que no fue mucho.
¿Temiste por tu vida?
En ese momento no temí por mi vida porque me cogió desubicado, no sabía lo que estaba pasando realmente porque nunca había vivido algo así, pero cuando me fui dando cuenta de lo que realmente pasaba solo temía por que no se me cayera el techo encima.
Algo que nunca olvidarás de la experiencia vivida…
Yo creo que lo que nunca olvidaré es la noche que pasó todo, porque fue algo que nunca había vivido y que no se lo desearía a nadie. A partir de esa noche casi todas las demás dormimos mi pareja y yo con miedo por si pasaba otro.
Evidentemente quitando eso la experiencia en Marrakech fue perfecta, la ciudad es una maravilla y choca ver la diferencia de cultura.
Has tardado varios días en volver, ¿por qué?
Tardé varios días porque teníamos contratadas excursiones tanto al desierto como a otros sitios sin edificaciones donde el peligro de derrumbamiento era nulo. Por ello decidimos aguantar los días que nos quedaban y disfrutar de ellos viviendo la cultura de la ciudad.
¿Has podido ayudar en el tiempo que has estado allí?
Pudimos ayudar tanto informando a varios medios de comunicación de la realidad vivida en la ciudad como económicamente aportando dinero a los comercios y comida a los necesitados.
¿Cómo se puede colaborar con el pueblo marroquí desde España?
Creo que Marrakech es una ciudad que vive principalmente del turismo y lo que necesita es que la gente no tenga miedo a visitar la ciudad, ya que es una zona sin riesgo de terremoto y ha pasado una vez, como podría haber pasado en cualquier otro sitio. Que conozcan la ciudad unos días y aporten dinero a los comercios, ayuden a los necesitados, etc.
David Roldán anima a conocer Marruecos.
