Fernando Vaquero es pintor y nazareno de adopción
El pintor Fernando Vaquero Valero ha presentado su última obra, que no es otra que el cartel de la Semana Santa de Sevilla 2019.
El lema elegido por Fernando Vaquero para titular el cartel ha sido ‘Oh, vosotros que atravesáis el camino’.
Según comenta, cuando recibió el encargo, en el mes de septiembre se planteó una obra compuesta por cuatro elementos fundamentales: evangélico, sevillano, cofrade y personal.
Ideas
Las primeras ideas de lo que plasmaría en el cartel le vinieron en el estudio de su amigo Carlos Valera, director de la película ‘Amargura’, con textos de Carlos Colón y voz de Antonio García Barbeito. Uno de los fragmentos del audiovisual afirma que lo sobrecogió, cuando Barbeito recitó una de las lamentaciones de Jeremías “Oh vosotros que atravesáis el camino , mirad y ved si hay un dolor semejante al mío” , aquella lamentación del profeta se oía sobre una “imagen de mi Virgen de la Amargura, como si fuese la propia María la que nos lo decía. Fue en ese preciso momento en el que me dí cuenta de que estaba ante el germen de la idea , el hilo del que tirar para construir mi cartel.
Representar el dolor de María, la amargura de una madre que acaba de perder a su hijo”, afirma Fernando Vaquero.
Continuando en su búsqueda, visionó la película ‘La Pasión’, de Mel Gibson en la que se ve el sufrimiento de María “sin extravagancias, sin lágrimas, casi en silencio, pero sobrecogedor”; “estaba por tanto ante la idea de mi cartel: el lamento en silencio de María , una simbiosis entre Maria y las palabras del Profeta”, comenta el autor.
Fernando Vaquero cuenta que de la escena de la película no solo surgió el motivo central sino también algunos detalles “que formarían parte de mi composición: no buscaba un cartel tipo collage con varios ambientes sino una escena única”.
Cofrade sevillano
Una vez encontrada la parte evangélica necesitaba las siguientes, entre ellas, la sevillana. Así, vio en la Catedral, el ‘Descendimiento de la Cruz’ de Pedro de Campaña, que dicen observaba Murillo y que en él se inspiró para hacer su Piedad, que se encuentra en el Museo de Bellas Artes.
La parte cofrade vino de la mano de la Virgen de la Quinta Angustia que “es una Dolorosa que mira hacia arriba, con un dolor sin extravagancias , sin lágrimas… lo que yo buscaba”, expone.
“El Cristo de la Caridad de Santa Marta fue un serio candidato desde el principio, no tuve que estudiar mucho ya que fue unir estas dos figuras en un boceto y sorprenderme con una maravillosa simbiosis tanto estética como emocional que funcionaba a la perfección.
Parte personal
Así Fernando Vaquero llegó a la parte personal e incluyó a San Juan y también un hábito de nazareno de su hermandad, la de la Amargura. No se ha olvidado en su obra de otros detalles así: “En mi pintura la mano del Cristo parece señalar el lugar y la época donde empezó todo, donde se fraguó la Semana Santa de Sevilla , vemos en la lejanía del tiempo un pequeño cortejo de disciplinantes camino del templete de la Cruz del Campo. Un camino que se iniciaba en la casa de Pilatos y terminaba en este lugar , los disciplinantes portan la cruz de las toallas, símbolo de aquella época y que custodia como sabéis la Hermandad de los Negritos”.