La Virgen del Carmen o una devoción veraniega con cada vez más arraigo
La salida de la Virgen del Carmen ha venido a llenar un hueco dentro del mundo festivo del verano nazareno. Me he impuesto la tarea de reflejar en una parte de mis artículos -no por cierto la que más me gusta- el calendario festivo ya sea religioso -exuberante hasta unos extremos difícilmente superables- o civil pues nuestra Feria de Mayo, nuestro Carnaval o algunas de nuestras veladas son difícilmente superables.
Pero bueno hoy nos toca hablar de una fiesta religiosa que se celebraba en la intimidad del templo por muchísimos nazarenos y que, gracias al actual párroco de Santa María Magdalena, don Manuel Sánchez de Heredia, y a otras muchas personas entre las que quiero destacar a la camarera de la Virgen Ana Rivas Jurado incansable y celosísima de todo lo que sea el culto a María Reina del Monte Carmelo. Y es que ya sale a la calle la Virgen del Carmen. Y es que esa Virgen que las clases humildes -las más numerosas del pueblo- pero también las más encopetadas veneraban en la casa que fue de los Bienvenida en la calle Real Utrera y que después pasó a la capillita de su título, una más de las muchas de Santa María Magdalena, esa Virgen tan venerada por las aceituneras -como lo era el Santo Niño de la Alegría de Santa Ana hoy retirado lamentablemente del culto- ha visto ya la calle en los últimos años.
Este año el día 15 se celebró el besamanos y el jueves día de la festividad de la que es Reina del Carmelo y Estrella de los Mares se celebró la función que predicó don Manuel Sánchez de Heredia, al que repito tanto deben los fervores carmelitanos de Dos Hermanas. Luego salió en unas andas portadas por los devotos la Virgen en una multitudinaria procesión. Tengo que decir que aborrezco los concursos pero, en una simple comparación, por todo lo que mueve la Virgen en Dos Hermanas, podemos decir que la Virgen del Carmen tras la de Valme es la gran advocación mariana de Dos Hermanas.
Me gustaría añadir que acompañó a la imagen la Banda de Cornetas y Tambores Entre Azahares.
También me gustaría citar que el mismo 26 de julio se encontraba en besamanos la Virgen de Carmen, Dolorosa de la Agrupación Parroquial del Prendimiento de la Parroquia del Ave María y San Luis.
Me alegro, pues, mucho de este esplendor de los fervores carmelitanos hacia esa imagen que ha escuchado y escucha, como es palpable y evidente, los fervores de tantos y tantos nazarenos.
Sólo me resta añadir que ha restaurado su capilla el pintor Isidoro Villalba Corzo habiéndose trasladado la imagen a ella después de haber estado un tiempo en la Capilla Penitencial, antes ocupada por Jesús del Gran Poder y hoy por el Cristo del Abandono.
Pero pasada la Virgen del Carmen, Dos Hermanas se prepara para su gran fiesta patronal, para Santa Ana, celebración que cada vez, a Dios gracias, cobra más auge. Empezaron las fiestas con el besamanos los días 18 y 19 de julio. El día 20 fue trasladada la imagen solemnemente a la Parroquia para su triduo. Luego se celebró el triduo en su honor en los días 23, 24 y25. La función, solemnísima, tuvo lugar el día de la festividad de tan gran santa a las 10.30 horas. Tanto el triduo como la función la predicaron el párroco y director espiritual don Manuel Sánchez de Heredia.
El altar de cultos era sencillo pero enormemente elegante lo que demuestra que se pueden realizar magníficos altares sin tener por fuerza abundancia de cera y flores aunque no cabe duda que ambos elementos ayudan mucho.
El altar, que era precioso, llamaba la atención por sus velas y flores puestas con un mimo y un arte encomiable.
La Santa vestía además su manto mostaza bordado. Éste no es uno de los mejores en cuanto en calidad -los tiene mejores- pero, sin duda, es de los más elegantes por lo que siempre es un acierto ponérselo. La Santa, sin duda, iba con él majestuosa, como abuela del que es Autor de la Vida y como madre de la que es Madre del mismo. Felicito a la hermandad, las camareras y el vestidor por el acierto que han tenido en ponérselo aparte que estaba puesto de una manera exquisita.
Por otra parte, haciendo un guiño a los 475 años de la fundación Vera-Cruz fundada en Santa Ana se colocó en el altar el pequeño Cristo de Vera-Cruz de la hermandad del Rocío.
También es de notar que la Banda Municipal Santa Ana ofreció su tradicional concierto y que la Agrupación Musical de la Estrella interpretó sus Gozos desde la torre de Santa María Magdalena.
Y ya el 26 al 20.45 horas salió la procesión que fue multitudinaria tanto por el público como por el acompañamiento de hermandades u otras asociaciones.
En el campo musical abría la Banda de Cornetas y Tambores de Presentación al Pueblo y cerraba la Banda de Música Santa Ana.
En cuanto al exorno de la imagen y el paso, la Santa llevaba el mismo bellísimo manto mostaza, del que ya hemos hablado, mientras que las flores eran esquinas de gladiolos que ya son todo un clásico en la decoración del paso.
También es de anotar, que en conmemoración del traslado definitivo de la Virgen de Valme a la Parroquia hace 150 años la Santa llevó en su delantera una imagen de la Protectora de Dos Hermanas propiedad de la Hermandad del Rocío. Delante del monumento al pasar la Santa tuvo lugar un pequeño acto entre ambas hermandades.
Por otra parte, también se visitó a la hermandad de la Borriquita que conmemoraba los sesenta años de la bendición de la Estrella, obra de Manuel Pineda Calderón.
Como vemos todo han sido detalles con hermandades del pueblo que han conmemorado diversas efemérides, lo que dice mucho de la hermandad de la patrona que ha querido hacerse presente en estos eventos de otras hermandades de la villa, en este caso Vera-Cruz, Valme y Borriquita.
También me gustaría añadir que los capataces han sido Jesús García Ramírez y José Antonio Sánchez Reguera y que la Santa ha llevado luto por el costalero Diego Dorantes Ramírez.
Pero también Santa Ana tiene por suerte su parte laica y se celebra su tradicional velada, último resquicio de nuestros viejos Santiagos. En ella hubo diversas actuaciones. El día 25 actuaron Guajiros, Yerbabuena y Manuel Céspedes y el 26 Romería y los Soles.
Pues bien me queda por comentar otra gran, grandísima fiesta veraniega, la procesión, cultos y velada de la Asunción, lo cual haré junto con las fiestas que prepara ahora la hermandad veracrucista. Sólo me queda alegrarme del esplendor que han tenido las fiestas del estío nazareno, presididas como están por las patronales.
