Isabel ha ayudado a muchas personas a través de las páginas de El Nazareno
Ubi patronus imperat nauta minus’ o, lo que es lo mismo, ‘Donde manda patrón no manda marinero’ y me sugiere en el periódico mi compañera Valme J. Caballero Holgado escribir un artículo sobre una compañera de muchos años, Isabel Márquez Cordón, la astróloga de nuestra casa, y yo obedezco su sugerencia.
Tengo que decir, en primer lugar, que aunque la Iglesia no cree en el esoterismo, ha tenido ante él una postura ambigua, muy ambigua, a lo largo de la historia. En efecto, los papas tenían astrólogo y no sólo los papas sino los reyes, los generales, los ministros y se dejaban llevar por sus pronósticos. Isabel, que es una mujer de fe, dice que ella no ve contradicción entre su arte y la Religión. Incluso dice que sacerdotes, religiosos y religiosas han acudido a su consulta. Yo, prudentemente, no me pronuncio. Sólo sé que voy a escribir de una compañera y amiga.
Isabel es hija natural de una enfermera y matrona llamada igual que ella Isabel Márquez Cordón y que era conocida como Isabelita la Practicante. Había nacido su madre en el barrio malagueño de la Victoria. El abuelo de nuestra biografiada se llamaba Bartolomé Márquez y la abuela Rosario Cordón. El primero murió en la guerra y la segunda también. La madre de Isabel se vino, entonces, al Hospital de El Tomillar donde la crió una enfermera llamada Pilar y un terciario capuchino de Nuestra Señora de los Dolores del Colegio de San Hermenegildo, el Padre Laureano.
Ya mayor, Isabel y su madre vivían en la calle Alcoba, donde trataron mucho a mi familia que ha vivido siempre en esta céntrica calle.
La madre se desplazaba a todos los barrios de Dos Hermanas a poner inyecciones. Iba por ejemplo a las canteras de las Pedreras a ponerlas y de camino bañaba a los pobres.
Hay que decir que el padrino de nuestro personaje fue el alcalde don Fernando Fernández Martínez, conocido por ‘El Chato el Platero’, popular alcalde durante el Franquismo. Por ello se llama Fernanda Isabel, aunque siempre ha usado el segundo nombre.
Isabel estudió auxiliar de clínica y trabajó en el actual Hospital Virgen del Rocío, antiguo García Morato, en reanimación donde murieron muchas personas en sus manos.
Pero hay que preguntarse cómo le entró a Isabel el interés por el Esoterismo. En un determinado momento, cogió un libro de Astrología y le entusiasmó tanto que empezó a dar clases con un gran esotérico: Juan Antonio Pazos. Éste vivía en Triana. Daba muchas charlas de Esoterismo, de lo que significaba el Tarot, de lo que se componía la Astrología y de las profundidades de cada carta. Hay que decir que cada carta representa una historia de las profundidades del ser humano.
Hay que decir que los Astros influyen en las personas de muchas formas: en su forma de ser, en sus cualidades, en sus virtudes, en la capacidad, en la dulzura, en la agresividad, en la bondad, en la mayor o menor inteligencia de la persona.
En cuanto al Tarot, con sus 78 cartas, cubre el pasado, el presente y el futuro. Eso las cartas te lo van marcando. Cuando la persona hace el corte impregna su energía. El pasado es lo que ha atravesado, el presente lo que está viviendo y el futuro lo que está por entrar.
Pero mientras que Isabel estudia la influencia de los Astros y el Tarot no cultiva otras Artes esotéricas como la lectura de la mano o la baraja española. Tampoco hace cartas astrales.
Isabel ha tenido abierta la consulta unos 20 años. Ha trabajado en Televisión Nazarena con el programa ‘Más Allá de las Estrellas’, en Radio Realidad con ‘Las Profundidades del Tarot’, en Utrera en Radio La Voz de la Campiña con un programa de igual título, en la Radio de Los Palacios y Villafranca con otro programa del mismo título y en la Radio de El Cuervo con, de nuevo, un programa llamado igual.
Mas, tengo que volver a decir lo que referí al principio. Isabel no hace rituales de bruja. Al contrario ayuda al que lo necesita y -para ella- sus conocimientos no están reñidos con la Religión. Insiste, y mucho, que sus conocimientos no son contrarios para nada con el Catolicismo y con otros credos. Históricamente, tengo que decir que ha sido así. No es lo mismo un astrólogo que un brujo.
A ella, por ejemplo, le gusta el mundo de los ángeles. Ella considera que están ahí, nos protegen, nos aman y cada signo del zodíaco tiene un ángel. El de Aries es Camael; el de Tauro, Anael; el de Géminis, Rafael; el de Cáncer, Gabriel; el de Leo, Miguel; el de Virgo, de nuevo, Rafael; el de Libra, de nuevo, Anael; el de Escorpión, Azrael; el de Sagitario, Zadquiel; el de Capricornio, Cassiel; el de Acuario, Uriel; y el de Piscis, Azariel. Ya es sabido cómo la Iglesia cree en los ángeles, espíritus puros que están al servicio de Dios y que protegen a los hombres. Destacan Gabriel, el ángel de la Anunciación; Rafael, que protegió a Tobías y lo llevó al encuentro de su esposa Sara; Miguel que a los infiernos lanzó a Lucifer; y el Ángel de la Guarda de cada uno y después están los diversos coros. Pero no quiero que este artículo sea un tratado sobre los ángeles.
En cuanto a la familia de nuestra biografiada, está casada con un gitano de cuatro apellidos de la Puerta Osario de Sevilla: el policía local de Dos Hermanas José de los Reyes Bermúdez, hijo de Antonio Reyes y Rocío Bermúdez. Su esposo es tío del bailador Israel Galván de los Reyes. Isabel tiene dos hijas: Isabel, ayuda a domicilio para ancianos que tiene dos hijas Noemí y Evelyn; y Rocío, que trabaja fabricando las muñecas que parecen niños – ‘reborn’-, casada con Luis Picón y madre de Víctor y Silvia.
En cuanto al mundo de las devociones de nuestra biografiada, que, como digo siempre, es una muestra de su personalidad y de su psicología, es muy devota del Señor del Gran Poder de Dos Hermanas, del Señor de la Salud de los Gitanos de Sevilla, del Beato Fray Leopoldo de Alpandaire y de la Virgen del Rosario de Fátima. De hecho, acude al Santuario portugués de Fátima todos los años y organiza excursiones a la tumba granadina de Fray Leopoldo.
Admira mucho también la figura histórica y religiosa de Buda, que fue un maestro ascendido que quería la igualdad y el bienestar para todo. Como historiador y estudioso de las religiones, no me cabe duda la importancia que tuvo Buda para la Historia de la Humanidad. Creo que su mensaje ha sido mayormente de paz, lo que no quita para que el Budismo no se haya visto involucrado en guerras igual que el Cristianismo. Pero el anuncio de paz de esta religión ha hecho que al Dalai Lama, Su Santidad Tenzin Gyatso, jefe religioso y político del Budismo tibetano, le haya sido concedido el premio Nobel de la Paz.
En relación a nuestro periódico, Isabel, con su compañero Manuel, ha llevado a cabo una encomiable labor siempre llevando una palabra de consuelo para todo el que lo necesitaba. Se puede creer o no creer en su Arte y en lo que ella dice pero, lo que no cabe duda, es que sus palabras han sido un bálsamo de amor y cariño para todos los que han acudido a ella durante tantos años. Sus consejos han ayudado a muchísimas personas que han acudido buscando consuelo ante las vicisitudes de la vida y ha hablado con claridad, sacando lo mejor de ella misma e intentando sacar lo mejor de los demás.
Y acabo. Sólo me queda darle las gracias en nombre de toda la redacción de El Nazareno por los años que nos ha acompañado y por haber disfrutado de su presencia.