Abrió la discoteca 2001 que marcó todo un hito en la noche nazarena y, por extensión, sevillana
Recientemente ha fallecido José Asencio, uno de los hermanos Asencios, muy conocidos en el pueblo y que destacaron como empresarios. Tan sólo está entre nosotros Pastora.
José Asencio nace el 24 de septiembre de 1942, hijo del matrimonio formado por Antonio Asencio Barbero, que era un afamado tonelero, y Coradina Barreda Sánchez, que se dedicaba a sus labores.
Fueron seis hermanos: Antonio, Carlos, Manuel, José, Pastora y Coradina. Los Asencios vienen de Crevillente en Alicante, pueblo famoso por su simpar Semana Santa y son una familia curiosa. En primer lugar junto con los Gómez –los ‘Huertos’- se decía que eran de las estirpes más numerosas del pueblo. Esa mítica camarera del Simpecado del Rocío que fue mi tía Pepita Alonso Muñoz, llamaba la atención porque ponía en pie ambas familias. Por otra parte, las Asencios tenían y tienen fama de ser las mujeres más guapas, elegantes y con más estilo del pueblo. Podría poner ejemplos y lleno este artículo, pero vamos, este trabajo no es un magazine.
Volviendo a nuestro biografiado, diré que vivía en la calle San Antonio. Estudió en el Colegio San Hermenegildo de Padres Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los Dolores, vulgo los Frailes. No destacó como estudiante pero, en cambio, fue un buen deportista, concretamente un futbolista.
Pronto entró a trabajar en el almacén de aceitunas de la familia. Éste abría sus puertas en la Avenida de los Pirralos frente a la discoteca 2001. Luego el almacén lo heredaría el hermano Antonio -Antoñete como era conocido en el pueblo-. En el almacén estaban los cuatro hermanos: Antonio, Carlos, Manuel y José pero estos dos últimos tenían otros negocios como la hostelería.
José Asencio abrió su primer negocio de hostelería en la calle del Canónigo, el Mesón del Molino. Lo abrió con dos amigos: Curro Benítez García y Antonio Varela ‘El Chivo’. Este local es notorio porque se cantaba flamenco y vinieron a él personajes como el gran artista utrerano que fue Bambino.
Luego, cuando se separaron los socios abrió a principios de los 70 la discoteca Molibar. Fue un local tan revolucionario que tuvo problemas con la Guardia Civil, lo que hoy sería inconcebible. Como anécdota, pero harto significativa, hay que decir que las madres iban a la puerta del local para impedir que las hijas entraran en él.
Y, ya, por fin, el año 1978 se abrió la gran discoteca 2001. Los socios que la abrieron fueron nuestro protagonista, su hermano Antonio y Manuel Blanco Rodríguez, uno de los muchísimos Blancos de origen utrerano que poblamos, sobre todo, el centro de Dos Hermanas.
Desde luego, 2001 ha sido el negocio estrella de José Asencio, ha sido el más reconocido y el que más tiempo ha estado. A esta mítica discoteca han venido artistas como Rocío Jurado, María Jiménez, los Pecos, Azúcar Moreno, etc. Toda mi generación, por ejemplo ha pasado por la 2001. Ya he hablado en otra ocasión de mi reunión que era conocida por los solteros de oro porque casi todos, y éramos muchos, teníamos carrera. Paralela venía una reunión de niñas, muchas de las cuales casaron con niños de nuestra reunión. Y todos frecuentábamos 2001.
Después de cerrar 2001, Pepe Asencio se dedicó a negocios inmobiliarios. Pero vamos lo que le dio a él fama fue la discoteca. Por ella lo conocían en todos lados. Se dice también que era la discoteca más grande de Andalucía. Tanto mimaba Pepe su negocio que iba a otros sitios para ver nuevas tendencias. Es el caso de Ibiza y Marbella. Un dato curioso es que abría de martes a domingo y cerraba el lunes.
De igual manera debemos citar que los camareros entraban muy jóvenes y se llevaban muchos años. Se decía que uno de los secretos del negocio era el equipo de trabajadores y la seriedad de los dueños.
Mas no puedo dejar de decir que también estuvo, como se ha visto, vinculado a la aceituna en sus años más jóvenes. La hostelería y la aceituna son, pues, los dos polos de su vida laboral.
Otro dato de su biografía es que hizo el servicio militar en Morón de la Frontera.
Pasando a su vida familiar, estaba casado con la nazarena Encarnación Rodríguez Palma, trabajadora que fue en la fábrica de Yute, hija del albañil Antonio Rodríguez Rodríguez y Ana Palma Mata. Tiene tres hijos: Mónica, empresaria que ha estudiado Administración y Dirección de Empresas y que tiene dos hijos Massimo y Carla; José Carlos, empresario que ha cursado Marketing y Comunicación y tiene una hija, Maya; y Germán, empresario casado con Paloma Sevilla Vilar y que tiene tres hijas: Paula, Jimena y Valeria.
La familia ha vivido en la Moneda, la calle Botica, la calle del Canónigo y hoy en la Hacienda.
En cuanto a sus aficiones era muy bético, tenía el carnet y su grupo de amigos. Él personalmente había jugado al fútbol con su grupo de amigos. También le fascinaban los coches caros y los tenía en perfecto estado de revista sin una mota de polvo y listos para salir corriendo. Hay que anotar que trajo el primer Jaguar Triple X a Dos Hermanas.
Era una persona muy elegante, todo un dandy. Vestía con chaqueta y corbata aunque fuera para ir por el pan. Le gustaba mucho comprar ropa. Vestía en Sevilla en Ibañez, en Cañete, en El Corte Inglés. Tenía un armario digno de revista. Él lo mismo iba elegante en Dos Hermanas, en Lebrija o en Marbella, o sea, en cualquier sitio. Era todo un señor clásico.
También le gustaba, y dice mucho de él, Marbella y su entorno. Disfrutaba mucho en esta ciudad con el ambiente de los famosos. Él veía a Marbella muy exótica con sus restaurantes buenos y los coches nuevos. Iba incluso con los discjokeys de la 2001 a comprar discos para la discoteca.
Igualmente le gustaba mucho la vida familiar y le agradaba sobremanera comer con toda la familia e iban por ejemplo a comer a Sevilla a sitios escogidos.
Igualmente era un buen amigo de sus amigos entre los que podemos citar a: Pepe Gómez ‘El Aceitero’, su compadre padrino del hijo Germán; Antonio Varela ‘El Chivo’; Curro Benítez García; Rafael Amador y Pepe Hidalgo Reina.
En cuanto al mundo de las mentalidades y su universo religioso, era creyente y tenía los valores propios del cristianismo como: bondad, gran corazón, ayudaba a los demás, etc. pero, como tantos, no era practicante.
En cuanto a las hermandades, tuvo especial cariño al Santo Entierro y el local donde estuvo esta cofradía frente a la Cruz de los Caídos era de él. Sus hijos José Carlos y Germán, por otra parte, salieron de nazarenos en la Borriquita y el Santo Entierro.
Otro dato muy interesante es que le gustaba mucho la feria y fue socio fundador de la caseta El Revuelo, perteneciendo hasta su óbito a la caseta La Bulería.
Sus hijos recalcan mucho que ha sido un magnífico abuelo, muy generoso con los niños y éstos han disfrutado con él. Muestra de que el núcleo familiar es fuerte es que la familia tiene la costumbre de ir juntos se viaje. Van por ejemplo a casas rurales en la Sierra de Cádiz. Por otra parte, para veraneo tienen una casa en Marbella. En el 2018 hicieron un crucero por el Mediterráneo parando en Sicilia, Malta, Civitavecchia Génova, Marsella y Barcelona.
En cuanto a la visión que un personaje tan destacado en la vida pública como José Asencio Barreda tenía de Dos Hermanas, era un amante del pueblo y se veía muy integrado en la vida social -de lo que doy fe- y era conocido por muchísima gente.
Pues bien, ha muerto el último de los varones Asencio Barreda, unos hermanos que han hecho historia en el pueblo sobre todo por sus negocios.
Creo que ha podido verse en este sencillo artículo el papel tan importante que en la vida de nuestra ciudad tuvo Pepe Asencio, uno de cuyos negocios marcó indeleblemente varias generaciones. Goce, pues, del sueño de los justos.