Curso de Lengua de Signos Española en la Pablo de Olavide

0
Lengua de Signos

Abierto el plazo de matrícula para todos los idiomas incluido el curso de Lengua de Signos Española

Este año se añade, al Servicio de Idiomas, un Nuevo curso de Lengua de Signos Española en la Universidad Pablo de Olavide – UPO-. Este se suma a la oferta que ya tenían y que está compuesta por cursos de Inglés, Francés, Alemán, Chino, Japonés y Portugués.

De esta manera, la UPO quiere resaltar el carácter inclusivo de este servicio, adaptándose a las demandas de la sociedad actual.

La lengua de signos es la lengua natural de comunicación y expresión de las personas sordas. Como importante activo de la cultura española, está reconocida, promovida y difundida como vehículo de comunicación de estas personas para su desenvolvimiento en la vida cotidiana, así como considerada una herramienta fundamental para la plena participación social, política, cultural y económica. No se trata una lengua basada en la mímica, sino que al igual que las lenguas orales, posee gramática, fonología, semántica y pragmática propias. En este caso, el canal empleado para la comunicación es el viso-gestual y su gramática, que es muy rica, se caracteriza por movimientos, configuraciones, orientaciones y ubicación espacial de las manos, a los que se añaden elementos no manuales.

Existen diferentes lenguas de signos y cada una de ellas tiene unas características propias que las diferencian de las demás. Durante este curso académico, se estudiará la Lengua de Signos Española en la UPO que es una de las que conviven en nuestro país junto con la Lengua de Signos Catalana (LSC). Los orígenes de la LSE datan del siglo XVI pero no es hasta 2007 cuando el ordenamiento jurídico regula su existencia mediante la Ley 27/2007, de 23 de octubre, por la que se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que en España puede haber alrededor de un millón de personas sordas, con más incidencia en las mujeres que en los hombres. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) contabiliza sobre 100.000 los españoles y españolas que utilizan la Lengua de Signos.