Las pequeñas nazarenas Rocío y Lola Avilés Ortega se consagraron, el pasado viernes, como artistas revelación en el espectáculo ‘Dos Hermanas suena a Valme’, que acogió el Teatro Municipal Juan Rodríguez Romero.
Rocío tiene diez años, estudia sexto curso de Primaria y cuarto de piano en el Conservatorio Elemental de Música Andrés Segovia. Ella fue la encargada de ponerle la música a las sevillanas ‘María Madre de Valme’, cuya letra era de los Serafines de Valme y que data de 1974. Su voz y sus manos tocando el piano enmudecieron al público; y todavía quedaba una sorpresa más: su hermana Lola, que también cantó, hizo una original coreografía en el estribillo, con mantón de manila.
También, Rocío interpretó unas sevillanas que Federico Alonso Pernía escribió al mítico carretero ‘Arias’ para que ella las cantara en esta ocasión, tituladas ‘Arias de Valme’.
Ambas dejaron huella en los asistentes. Y es que las hermanas son conocidas devotas de la Virgen de Valme y viven intensamente, en el seno familiar, la Romería y muchas de las tradiciones de nuestro pueblo. Son ya pequeñas grandes artistas; sus carreras no han hecho más que comenzar…
El espectáculo fue muy variado. El coro de la hermandad de Valme interpretó varias piezas con los sones de la Banda Fernando Guerrero de Los Palacios y Villafranca; el Grupo de Danzas ‘Ciudad de Dos Hermanas’ escenificó una estampa del verdeo, tan característico en nuestro pueblo hace años, para anunciar que se acercaba octubre y con este mes, la Romería de Valme. Y el cantante Sergio Díaz, conocido por su participación en el programa ‘Se llama copla’, le puso un gran sentimiento a todas sus interpretaciones con su magistral voz.
De la mano de Antonio Diosdado y Manuel Pérez, presentadores del acto, se hizo un recorrido por algunas de las letras más conocidas dedicadas a Valme y de la ‘época dorada’ de estas composiciones.
En el transcurso del acto se tocó un pasadoble denominado ‘Fulgencio Morón’ en honor a este músico nazareno; además, se rindió un homenaje al compositor Federico Alonso Pernía y se le dedicó una pieza a dos personas de Valme, estrechamente vinculadas a la hermandad y recientemente fallecidas: Francisco Javier López Sánchez y Magdalena Romero Navarro.
El Teatro colgó el cartel de ‘No hay entradas’ varios días antes del espectáculo y muchos se quedaron sin poder asistir al mismo. Todos los presentes salieron muy satisfechos y encantados con esta jornada de víspera de Valme.